El piloto Benjamin Leuchter y el futbolista Max Kruse unen fuerzas.
Puebla, Pue., a 27 Julio 2018. Hoy, al igual que entonces, las buenas amistades son un tanto escasas. Pero la excepción confirma la regla. Tomemos por ejemplo a Max Kruse y Benjamin Leuchter. El futbolista profesional que juega en el SV Werder Bremen y el piloto de carreras profesional, cuyos roles incluyen también ser el embajador de la marca y representante del deporte motor para Volkswagen.
Su historia empezó en el otoño de 2015. Max Kruse tenía 27 años, y jugaba para el VfL Wolfsburg y la selección nacional alemana. “Hicimos un entrenamiento sobre seguridad al conducir con Volkswagen”, recuerda Kruse. “Lo encontré fascinante porque me di cuenta que tenía que aprender aún más”. Al igual que muchos de sus compañeros futbolistas profesionales, Kruse también tiene algo de aficionado del volante. Recientemente acaba de adquirir un auto deportivo. “Yo quería tener un mejor control sobre mi auto nuevo”, nos explica. “Si nunca has manejado un auto de ese tipo, es mejor saber qué hacer en situaciones peligrosas”.
La primera reunión: Groß Dölln
El lugar para el encuentro fue el Centro de Conducción Groß Dölln en el estado alemán de Brandenburgo. “Nadie me dijo quién era realmente Max Kruse hasta poco antes del entrenamiento”, comenta Leuchter sonriendo. Cuando nos conocimos, la impresión inicial que tenía Leuchter después de la conversación telefónica se confirmó. “Podías decir de inmediato que Max era ambicioso”.
Después del programa estándar, con slaloms, frenado y derrape, la pareja se encaminó hacia la pista de manejo. Inusual para principiantes. “La curva de aprendizaje ese día fue realmente aguda, así que pude ponerme al nivel de la intensidad muy pronto. Su talento con el auto realmente me sorprendió”, admite Leuchter. Durante el entrenamiento, ambos deportistas empezaron a conversar. Kruse, futbolista de 1.81 metros de alto, y Leuchter, el diminuto piloto de carreras de 1.65 m, se empezaron a llevar bien desde el primer instante. Desde entonces se han mantenido en contacto.
Un objetivo compartido: Nordschleife
Kruse fue, y sigue siendo, extrovertido. Necesita libertad. Quiere hacer realidad sus ideas. Por ejemplo, involucrarse con el deporte motor. En ese momento, Benny Leuchter estaba ya en la ruta para labrarse un camino en las carreras de autos. En 2016, estableció el récord mundial para vehículos de carretera con tracción en las ruedas delanteras en el circuito Nürburgring-Nordschleife – uno de los circuitos más difíciles del mundo. También ha conducido un Volkswagen Golf GTI TCR de 350 Hp en el recientemente formado TCR Germany y el VLN Endurance Championship. Kruse vino a verlo correr y quedó cautivado con el ambiente.
Los dos empezaron a reunirse con regularidad fuera del trabajo. Empezaba a cuajar la idea de un proyecto conjunto en el deporte motor. El objetivo principal era correr juntos en la carrera de 24 horas en el circuito de Nürburgring. Kruse estaba ansioso por aprender, tan pronto como fuera posible. Sin embargo, una cosa es mostrar cierto talento en un curso de seguridad al conducir, y otra completamente diferente es participar en el clásico de resistencia en Nordschleife.
Leuchter tuvo que dejar en la cuneta las ambiciones de su amigo. No es que simplemente te registres y corras. Kruse necesitaba una licencia y, sobre todo, experiencia en carreras. El futbolista se propuso obtener la licencia C nacional. Al hacerlo, también experimentó por primera vez Nordschleife – como pasajero de Benny Leuchter. “Salimos a dar una vuelta a la pista y para el final del día ya podía recordar con precisión cada sección del circuito”, comenta el instructor Leuchter, impresionado por su alumno Kruse. “Algunos profesionales necesitan años para lograr eso”.
Siguiente paso: Su propio equipo
A Kruse ya se le había metido la espina. Sin embargo, el tiempo no es algo que le sobre a un jugador de la Bundesliga. Estaba claro para ambos, Kruse y Leuchter, que simplemente reservar un día al volante con otros equipos de carreras no era un concepto sostenible. “Esto te puede costar rápidamente unos 10,000 euros. Puedes invertir el dinero en formas mejores”, comenta Kruse. Eso quiere decir, fundar su propio equipo de carreras. “Nos quedaba claro que el proyecto no iba a generar ganancias”, admite un Kruse realista. “Sin embargo, debería permitirnos probar cuando se ajustara a nuestra agenda. Y tendríamos la oportunidad de arrancar nuestro propio negocio y construirlo”.
No bien lo había dicho cuando ya estaba hecho. Para principios de 2018, el proyecto estaba en plena actividad. El equipo Max Kruse Racing ya estaba funcionando. Formar un equipo era algo nuevo para ambos. Hasta ahora, Leuchter había estado involucrado principalmente como piloto, mientras que Kruse no había estado involucrado en lo absoluto en el deporte motor. De todas formas ellos estaban en el mismo canal. Esto era obvio cada vez que hablaban sobre el proyecto.
“Al principio teníamos que depender de personas con más experiencia”, explica Kruse. “ADAC TCR Germany fue la mejor opción para nosotros. El estándar de esta serie de carreras es muy alto, pero los costos son relativamente bajos en comparación con otras series”.
El modelo de negocios: Deporte motor y seguridad al conducir
Al igual que el deporte motor, Max Kruse Racing también ofrece cursos de seguridad al conducir para clubes, asociaciones, jugadores y compañías. “Los futbolistas profesionales, en particular, con frecuencia conducen autos de alto desempeño sin saber cómo controlarlos en situaciones de emergencia”, dice el delantero, con conocimiento de causa. “Con nuestra variedad de entrenamientos, queremos enseñar a la gente a conducir de manera responsable”.
Kruse ya logró convencer a su club, el Werder Bremen, de que su idea es buena. El club de la Bundesliga participó recientemente en un entrenamiento de seguridad al conducir con la Volkswagen Driving Experience como parte de un campamento de entrenamiento en Zillertal. Evento organziado por: Max Kruse Racing.
Leuchter también está entusiasmado en aprender cómo logra Kruse irradiar una actitud tan relajada. “Me sorprende la manera en como maneja las cosas. Estoy aprendiendo mucho de él”. Ambos son relajados y tranquilos cuando se trata de sus autos personales. Kruse conduce un Golf R, mientras que Leuchter tiene un Golf GTI.
El secreto del éxito: Armonía
El éxito para Max Kruse Racing no significa solamente victorias y trofeos, sino también un gran número de reservaciones para los cursos de seguridad al conducir y la capacidad de seguir desarrollándose. En el corazón de todo esto está el éxito en ADAC TCR Germany. “Cuanto más éxito tengamos en la pista de carreras, más atención mediática recibiremos”, dice Leuchter.
El dúo está siguiendo su plan a largo plazo con Max Kruse Racing. “Ciertamente no pretendemos darlo por terminado una vez que ha transcurrido un año”, cuenta Kruse. “No necesitamos este equipo de carreras para seguir siendo amigos, pero este tipo de proyectos ciertamente unen a las personas”, enfatiza. “Quizás Benny en algún momento se involucre conmigo con el futbol.”
Leuchter lo mira escéptico: “Bueno, al menos ya fui a algunos partidos. Pero estoy seguro que en algún momento empacaré mis botas y podemos salir a una “cascarita” juntos.”
Si el futbol no funcionara, los dos amigos tienen otra cosa en común, además del deporte motor: el póker. Aunque aún les falta jugar como contrarios. ¿Quién ganaría? Ambos evitan dar una respuesta más allá de una sonrisa. Dos hombres que juegan a ganar. Dos buenos amigos.