El equipo Ferrari volvió a perder terreno respecto a su máximo rival este fin de semana, en esta ocasión con Mónaco como escenario protagonista. Los de Maranello no tenían ritmo suficiente para luchar de tú a tú con los alemanes, pero sí para hacerlo con Red Bull. Sin embargo, los hombres del "Cavallino Rampante" cometieron una equivocación de gran envergadura durante la Qualy del sábado y dejaron fuera de la Q2 a Charles Leclerc, lo cual comprometió por completo su carrera, pues Montecarlo es conocido por ser un trazado donde llevar a cabo adelantamientos es una odisea. Después del abandono del monegasco ayer, precipitado por un intento a la desesperada de realizar una remontada casi imposible, el que fuera director deportivo de Renault, Flavio Briatore, sigue preguntándose cómo Ferrari pudo cometer un error de principiante sabiendo lo que se jugaba en esta prueba. Y es que los de Maranello optaron por mantener en el garaje a Leclerc durante el tramo final de la Q1 pensando que su tiempo era suficiente para acceder a la siguiente sesión. Un hecho que al final no se produjo, ya que Nico Hülkenberg fue capaz de batir su registro y, por ende, dejarle fuera de juego.
"Todo el mundo sabe que el circuito de Montecarlo se vuelve cada vez más rápido; incluso en Fórmula 3 la pista se vuelve tres décimas de segundo más rápida y... ¿Ferrari deja a su piloto en el garaje aun sabiendo todo lo que hay en juego?", ha indicado el italiano en unas declaraciones concedidas a la publicación Automoto.
Controversia con las gomas
Por otro lado, Briatore ha hecho mención especial a los neumáticos, asegurando que el continuo cambio de compuestos de un Gran Premio a otro provoca un importante caos dentro de los equipos, ya que algunos no son capaces de comprenderlos. Ante esta situación, el de Cuneo plantea que cada escudería cuente con un neumático blando para la clasificación del sábado y otro para la carrera del domingo, ya que así se facilitaría el trabajo dentro de los garajes: "De una carrera a otra los neumáticos cambian, y algunos equipos los entienden, pero otros no. Es una lotería. Sería mejor dar a toda la parrilla una rueda blanda para clasificación y otro para el Gran Premio, y mantener eso durante cuatro años. De este modo, incluso los que no entiendan cómo hacer que funcionen, lo harán tarde o temprano. Siempre escucho que se habla sobre los neumáticos, pero a nadie le importa", ha señalado para finalizar.